27 septiembre, 2010 / Noógrafo

Huelga General en España. Sobra la información, pero faltan ganas.

Se escucha un cierto clamor sordo, con toda seguridad iniciado en los círculos más antisociales y que ha calado en lo que parece una mayoría social de toda la clase trabajadora: la Huelga General no sirve para nada, va a ser un fracaso y no deja de ser un intento de engaño de los sindicatos -corruptos, para hacerse con mayores cotas de poder y presupuestos.

Se desvía la atención: la reforma laboral por su parte sale fuera de los foros; el PP le hace el juego sucio al gobierno y quita importancia a la última vuelta de tuerca que dejará casi sin derechos a los trabajadores y la trabajadores en España, a no ser que se utilice por la oposición derechista para catalogarla de blandengue y prometer una más dura nada más llegue al poder.

Digamos pues que la Huega General, al ser un instrumento de la izquierda de clase ha perdido de antemano la batalla de los medios, que están absolutamente en contra de cualquier exigencia de la mayoría social para que sus condiciones laborales no sigan precarizándose. Ya no se habla de que paguen la crisis los que la provocaron (aquellos que tienen el capital), ni de que ésto lo arreglamos entre todos (la vergonzante campaña de los bancos, las cámaras de comercio y las constructoras). Hoy por hoy nos conformamos simplemente en conservar el puesto de trabajo o en tener un subsidio de desempleo hasta que capee el temporal. No se trata de la revolución ni de quemar las calles, sino de impedir que nos roben las pocas migajas que nos quedan.

Es cierto que los CC.OO. y UGT son cómplices en el empeoramiento de las condiciones laborales desde su reconocimiento como agentes sociales. También es cierto que han perdido legitimidad, que menos de un 17% pertenecen a alguno de las dos centrales sindicales. Y que siguen estando amparados por la ley como los únicos sindicatos con capacidad para negociar, los más representativos según las leyes (Ley Orgánica 11/1985, de 2 de agosto, de Libertad Sindical).

Pero currémonos al menos un poco la crítica: esta no es una huelga de los sindicatos mayoritarios, sino de todas y todos los trabajadores. Las leyes no las hacen los sindicatos, ni la crisis es culpa de ellos (al menos no de manera activa). El fracaso de esta huelga situará a España entre los países con peores condiciones laborales de Europa.

Dinero a TODOS los sindicatos: 15 millones de euros; 36 millones de euros para Partido Popular, 32 millones el PSOE.

Una de las críticas más soeces escuchadas desde los partidos políticos (sobre todo el PP, qué curioso, con el cuidado que tiene al custodiar dinero público) es la cantidad de millones que se llevan los sindicatos (todos los que consiguen subvenciones). Es fácil llevarse las manos a la cabeza si decimos que en este año se presupuestaron casi 16 millones de euros. Al menos sabremos que ese dinero no (deben) gastarlo en trajes ni en Gürtels. Hace falta ser un estúpido o un demagogo para pensar que todo ello se gastará en comilonas.

Pero juguemos un poco a su juego y practiquemos por un momento un poco su demagogia: ¿cuánto dinero se lleva el Partido Popular? Casi 36 millones de euros en lo que llevamos de 2010. Pensemos realmente para qué narices quieren tanto dinero; ¿acaso se encargan de defender los derechos de los trabajadores ante un despido? Más bien no. Últimamente bastante tienen con demostrar sus afiliados dónde está todo el dinero que dicen se han llevado.

Por cierto ¿cuántos millones de euros pueden haber robado aquellos peperos acusados de corrupción? ¿Cuántas miles de familias podrían comer con toda esa pasta?

Y ¿cuánto dinero se ha llevado el PSOE? Casi 35 millones de euros. Para qué querrán tanto: ¿no será para pagar asesores de imagen de ZP? Lo estarían tirando a la basura. 85 millones de euros en total se embolsan esa clase parásita que aupamos como representantes cada 4 años.

Ayudas a los bancos para reflotar su economía: 100.000 millones

Digamos que pocas cosas se pueden añadir a este titular. Propongamos darle la vuelta a las razones que nos hacen ir al trabajo y seamos capaces de indignarnos, aunque sea, un poco. ¿Ya nadie se acuerda de la búrbuja inmobiliaria? ¿del robo de dinero público de los políticos? ¿Del 20% de paro en España?

¿No son esas suficientes razones para salir a la calle a protestar y pedir, por vergüenza, una segunda y una tercera huelga general? Me pregunto que hubiera pasado en Francia si se tuviera un 20% de paro.

Una pequeña recopilación de razones para entender la Reforma Laboral y la Huelga General

Se que todo lo anterior parece un discurso fácil. Es lo bueno, que hay razones muy sencillas para impedir todos estos atropellos, aunque finalmente la razón sea la maldita reforma laboral. No obstante, para todas aquellas personas que se planteen siquiera una mínima duda sobre qué debe hacer el miércoles 29 de septiembre de 2010, justo el día que se convoca la séptima Huelga General que se convoca en el período democrático, y que desee hacer una recopilación de razones antes de decidir sumarse al carro del Gobierno, el PP y los empresarios, les dejo aquí un pequeño listado de razones fáciles de asimilar para sumarse a la Huelga General: